Luis Rubiales ha declarado ante un tribunal que la futbolista española Jenni Hermoso dio su consentimiento antes de que él la besara en la final de la Copa del Mundo femenina en 2023. El ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) está siendo juzgado acusado de agresión sexual e intento de obligar a la Sra. Hermoso a decir públicamente que el beso fue consensuado. En su testimonio, el Sr. Rubiales, de 47 años, dijo estar “absolutamente seguro” de que la jugadora dio permiso para el beso, añadiendo: “En ese momento fue algo completamente espontáneo”. El incidente ocurrió durante la ceremonia de entrega de medallas después de la victoria de España en la Copa del Mundo en Australia, desencadenando protestas y llamados a la renuncia de Rubiales. Él niega cualquier conducta delictiva. Rubiales describió el beso como “un acto de cariño” ante la Audiencia Nacional de Madrid el martes. “Jenni me abrazó”, dijo. “La conozco desde hace muchos años y la besé porque ella era una campeona. Fue un momento tremendo para ella. Éramos campeones, nos estábamos agradeciendo mutuamente. Ella me apretó fuertemente por la cintura y luego le pregunté si podía darle un beso y ella dijo que sí”. Añadió: “La agarré para no caerme hacia atrás”. Rubiales fue interrogado en el tribunal sobre si le pidió a Hermoso un beso o un “besito”. “No puedo recordar exactamente”, respondió. “Pero creo que fue un besito”. También se le preguntó si estaba al tanto del protocolo contra el acoso sexual y la violencia sexual, a lo que respondió que sí estaba al tanto. Hermoso ha dicho anteriormente al tribunal que nunca dio permiso para ser besada y que el incidente “manchó uno de los días más felices de mi vida”. La delantera de España dijo: “Mi jefe me estaba besando, y esto no debería suceder en ningún entorno social o laboral”. Añadió: “Un beso en los labios solo se da cuando yo decido hacerlo”. Hermoso dijo que poco después del beso la apartaron y le pidieron que consintiera una declaración minimizando el incidente, a lo que se negó. Rubiales luego le pidió que grabara un video con él en el vuelo de regreso porque estaba siendo acusado de agresión en las redes sociales, dijo al tribunal. Dijo que había recibido amenazas de muerte que la llevaron a trasladar a su familia a México, donde juega actualmente. Un experto en lectura de labios dijo al tribunal el martes que Rubiales le preguntó a Hermoso “¿puedo darte un beso?” basándose en imágenes de video donde no se podía ver la cara de la jugadora. Rubiales reconoció que “cometió un error” en el podio y que su comportamiento “no fue apropiado”, diciendo que debería haber “estado en un papel más institucional”, pero negó haber cometido alguna falta. Dijo que la atención mediática que ha atraído el incidente era “ridícula”, añadiendo que Hermoso nunca le reprochó el beso en ningún momento inmediatamente después del incidente. Rubiales dimitió en septiembre de 2023 después de que la FIFA lo suspendiera y los fiscales españoles abrieran una investigación. Tres de sus ex compañeros de trabajo también están siendo juzgados acusados de colusión en la presunta coerción: Jorge Vilda, entrenador del equipo campeón del mundo, Rubén Rivera, ex jefe de marketing de la federación, y el ex director deportivo, Albert Luque. Los cuatro acusados niegan los cargos en su contra. Los fiscales piden una pena de dos años y medio de cárcel para Rubiales. El juicio, que se extiende hasta el 19 de febrero, continúa.
