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Chevron dijo que recortaría hasta una quinta parte de su fuerza laboral global para fines de 2026 como parte de una iniciativa de reducción de costos destinada a simplificar el negocio de la importante empresa petrolera y fomentar el crecimiento.
El vicepresidente Mark Nelson dijo que los cambios implicarían optimizar la vasta cartera de $280 mil millones del grupo, utilizar la tecnología para mejorar la productividad y cambiar la forma y el lugar donde se realiza el trabajo.
“Esperamos que estas acciones resulten en reducciones de la fuerza laboral del 15 al 20 por ciento, comenzando en 2025 y completándose en su mayoría antes de finales de 2026”, dijo Nelson.
Los planes profundos de reducción de costos de Chevron llegan a pesar del llamado del presidente Donald Trump a los productores para que “taladren, bebé, taladren” y generen otro auge petrolero que podría reducir los precios de la energía.
Los planes fueron anunciados en noviembre cuando Chevron dijo que apuntaría a $2 mil millones a $3 mil millones en ahorros de costos “estructurales” específicos a través de ventas de activos, el uso de tecnología y cambios en los flujos de trabajo. Esto sigue a la reubicación de la sede de la compañía el mes pasado desde San Ramón, California, a Houston, Texas.
Chevron tenía alrededor de 46,000 empleados, incluidos los que trabajan en estaciones de servicio, a fines de 2023, según su informe anual.
Las reducciones de la fuerza laboral siguen a la publicación de resultados decepcionantes en el cuarto trimestre el mes pasado, con márgenes débiles que afectaron el rendimiento de su negocio de refinería. El grupo informó ganancias ajustadas de $2.06 por acción, por debajo de las estimaciones de Wall Street de $2.11.
“No voy a llamarlo la tormenta perfecta, pero fue un trimestre en el que hubo muchas cosas que fueron en una dirección y fue una dirección negativa”, dijo el director ejecutivo Mike Wirth a los analistas en una llamada de resultados.
Paul Sankey, un analista petrolero, dijo que los drásticos recortes en la plantilla de Chevron fueron una sorpresa pero reflejaron una acción “proactiva” de la compañía, en lugar de una “acción de crisis”. Chevron no tenía prisa por aumentar aún más la producción de petróleo porque ha acelerado dos grandes expansiones en la cuenca Permiana en Estados Unidos y en Tengiz en Kazajstán, dijo.
Sankey dijo que Chevron también estaba apostando por el crecimiento de su adquisición de $53 mil millones de Hess, una empresa petrolera estadounidense con operaciones en Guyana. Exxon ha iniciado procedimientos de arbitraje, retrasando el cierre del acuerdo.
Las acciones de Chevron cayeron un 1.5 por ciento después del anuncio del miércoles.
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Los analistas dijeron que la industria petrolera se estaba reajustando después de obtener ganancias extraordinarias en 2022 y 2023 tras la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania que provocó un aumento de los precios.
Ahora se están moderando, con precios del crudo Brent que se pronostica promediarán $74 por barril en 2025 y $66 por barril en 2026, por debajo de los $81 por barril del año pasado, según la Administración de Información Energética de EE. UU.
ExxonMobil, la mayor empresa petrolera occidental, reiteró el mes pasado su objetivo de lograr ahorros acumulados de $18 mil millones hasta finales de 2030 en comparación con 2019.
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