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La economía del Reino Unido creció inesperadamente un 0,1 por ciento en el cuarto trimestre, un impulso modesto para el Partido Laborista mientras busca cumplir sus promesas de reactivar la economía.
La cifra del PIB para los últimos tres meses del año, según la Oficina de Estadísticas Nacionales, marcó un aumento sobre el crecimiento cero en el trimestre que terminó en septiembre, pero sigue siendo consistente con una economía que lucha por ganar impulso.
Los economistas habían pronosticado una contracción del 0,1 por ciento en el cuarto trimestre, según una encuesta de Reuters. La libra se fortaleció después de la publicación de los datos, subiendo un 0,5 por ciento frente al dólar a $1,251.
La Canciller Rachel Reeves se ha comprometido a hacer del crecimiento la principal misión del gobierno, respaldando proyectos como una tercera pista en el aeropuerto de Heathrow en Londres y enlaces de transporte entre Oxford y Cambridge.
Pero la economía ha decepcionado repetidamente desde que el Partido Laborista llegó al poder, estancándose en la segunda mitad del año pasado. El PIB real por cabeza se estima que cayó un 0,1 por ciento en el cuarto trimestre, según la ONS.
Los últimos datos cerraron un “año decepcionante para el crecimiento”, dijo Hailey Low, una economista del Instituto Nacional de Investigación Económica y Social.
“La baja confianza empresarial y del consumidor sugiere que 2025 comienza en terreno inestable, con una débil inversión y un gasto cauteloso del consumidor que obstaculizan el impulso”, agregó.
En el conjunto de 2024, la economía creció un 0,9 por ciento, dijo la ONS, una mejora modesta respecto a la expansión del 0,4 por ciento del año anterior. Sin embargo, esto quedó por debajo de las predicciones en octubre por parte de la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria, el organismo de control fiscal del Reino Unido.
El crecimiento anual también estuvo muy por debajo del registrado en Estados Unidos, donde el PIB se expandió un 2,8 por ciento en 2024.
Se espera que la OBR reduzca sus previsiones de crecimiento en la próxima Declaración de Primavera, afectando a los ingresos fiscales y sumándose a las presiones fiscales que enfrenta la canciller.
La semana pasada, el organismo dijo a Reeves que el margen de maniobra que tenía anteriormente contra su regla presupuestaria clave se había agotado debido a factores como los malos datos económicos.
En respuesta a las cifras del PIB del jueves, Reeves dijo: “Durante demasiado tiempo, los políticos han aceptado una economía que ha fallado a los trabajadores. Yo no lo haré. Después de 14 años de estancamiento de los niveles de vida, vamos más lejos y más rápido a través de nuestro Plan para el Cambio para poner más dinero en los bolsillos de la gente”.
Las cifras de la ONS mostraron que la economía creció un 0,4 por ciento en diciembre tras una cifra de crecimiento no revisada del 0,1 por ciento el mes anterior. La mejora fue impulsada por la producción en el sector de servicios dominante del Reino Unido.