“What we’re trying to do is get people to think about things in a different way,” he said. “If you look at the big issues of our time — globalisation, the role of the state, technology, the environment — you can’t say there’s a left-wing or right-wing answer to these questions.”
Marshall also revealed that he has been in discussions with US tech entrepreneur Peter Thiel, who is a keynote speaker at the Arc conference, about a potential collaboration on a new media project. Thiel is known for his libertarian views and support of right-wing causes, making him a controversial figure in Silicon Valley.
Despite criticism of his media ventures and political connections, Marshall remains steadfast in his belief that the UK needs a “more diverse and vibrant media landscape”. He believes that his outlets provide a valuable counterbalance to the mainstream media, which he sees as dominated by liberal perspectives.
As the Arc conference approaches, Marshall is confident that the event will spark important conversations and challenge conventional wisdom on a range of issues. With a lineup of high-profile speakers and a growing audience, he hopes to continue shaping the debate around key societal issues in the UK and beyond.
Whether or not Marshall’s vision for a more conservative media landscape will come to fruition remains to be seen. But one thing is certain: his influence in the world of media and politics is undeniable, and his efforts to shake up the status quo are likely to have lasting effects on the public discourse.
El Espectador, concedió, es más tradicionalmente Conservador, pero con una posible “guerra de territorios” sobre elementos de “Trabajo Azul” – un grupo de votantes normalmente de clase trabajadora y culturalmente conservadores que actualmente se alinean con el partido de izquierda.
El evangélico cristiano de 65 años restó importancia a la fe en sus puntos de vista políticos, argumentando que “la fe y la política no se mezclan bien… es una combinación peligrosa”, una posición que lo enfrenta con algunos en la derecha de la política estadounidense que usan su religión como guía para las políticas sociales.
Marshall estuvo envuelto en controversia el año pasado después de que el grupo de campaña Hope not Hate revelara que le había gustado y compartido contenido de cuentas de extrema derecha en las redes sociales. Esto incluía publicaciones sugiriendo que “los europeos ‘nativos’ estaban ‘perdiendo la paciencia con los falsos invasores de refugiados'”. Su portavoz dijo en ese momento que la selección de publicaciones, que fueron eliminadas, “no representaba sus puntos de vista”.
A pesar de dominar gran parte del debate político, la migración no es uno de los cinco temas principales de Arc este año, dijo.
Marshall ha estado en un viaje político: el ex candidato parlamentario de Lib Dem pasó a convertirse en un gran partidario del Brexit y donante del Partido Conservador, y hoy en día no es miembro de ningún partido. Pero insistió en que un hilo conductor constante de sus creencias había sido la importancia de la ciudadanía y el equilibrio entre derechos y responsabilidades.