La declaración de Israel de que un cuerpo devuelto desde Gaza el jueves no era el de Shiri Bibas, como había dicho Hamas, plantea otro obstáculo en este acuerdo de alto el fuego. Se pensaba que los restos de Shiri, madre de dos niños, habían sido entregados junto con los de sus hijos. Pero el ejército israelí dijo que las pruebas forenses solo podían confirmar los cuerpos de Ariel y Kfir, quienes tendrían cinco y dos años, y no los de su madre. En cambio, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que Hamas “puso el cuerpo de una mujer de Gaza en un ataúd”, con Ismail al-Thawabta, un portavoz de Hamas, sugiriendo que los restos de Shiri se habían mezclado con otros cuerpos bajo los escombros después de un ataque aéreo israelí. En una declaración separada, el grupo afirmó su “seriedad y pleno compromiso con todas nuestras obligaciones” bajo el alto el fuego, y que no tenía “interés en incumplir”. También dijeron que se estaba llevando a cabo una investigación sobre el error, y pidieron que los restos de la presunta mujer palestina entregada por error a Israel fueran devueltos. La familia Bibas estaba entre las 251 personas tomadas como rehenes durante los ataques de Hamas el 7 de octubre de 2023 en Israel, junto con el esposo de Shiri, Yarden, quien fue liberado a principios de este mes. Israel lanzó una campaña militar masiva contra Hamas en respuesta, que ha matado al menos a 48,297 palestinos, principalmente civiles, según el ministerio de salud dirigido por Hamas. Ariel y Kfir, los más jóvenes de los rehenes israelíes, tenían cuatro y nueve meses cuando fueron secuestrados. Su madre tenía 32 años. Netanyahu ha amenazado con que Hamas pagará el “precio completo” por no entregar el cuerpo de Shiri, calificándolo como una “violación cruel y malvada” de su acuerdo. Aún no se han anunciado medidas más allá de Netanyahu diciendo que Israel actuará “con determinación para traer a Shiri a casa”. Pero una nueva afirmación de Israel de que Ariel y Kfir fueron “asesinados por terroristas a sangre fría” aumentará aún más los sentimientos en Israel. En noviembre de 2023, Hamas afirmó que los niños y Shiri habían sido asesinados en un ataque aéreo de las FDI. La BBC no ha podido verificar esto de manera independiente. El viernes, el portavoz militar israelí Daniel Hagari dijo que las pruebas forenses revelaron que Hamas mató a Ariel y Kfir “con sus propias manos”. “Después, cometieron actos horribles para encubrir estas atrocidades”, dijo, sin dar detalles sobre las presuntas lesiones. Hamas aún no ha respondido a estas acusaciones. Para los políticos israelíes dentro y fuera del gobierno de Netanyahu que han estado exigiendo la reanudación de la guerra en Gaza, estas afirmaciones se verán como más evidencia de que Hamas debe ser erradicado por completo. El alto el fuego está entrando en un nuevo periodo de incertidumbre, con la primera fase llegando a su fin, mientras que las negociaciones sobre la próxima etapa aún no han comenzado en serio. La segunda fase, en la que todos los rehenes restantes, vivos o muertos, deben ser liberados, se ha visto desde el principio como potencialmente más desafiante que la primera. Israel exige el desarme completo de Hamas, mientras que Hamas rechaza la perspectiva de que Israel siga manteniendo un estricto control de seguridad sobre Gaza. Cualquier colapso importante en el acuerdo podría llevar a un regreso a la lucha. Por otro lado, está quizás la mayoría de la opinión pública en Israel, que considera que nada debe interponerse en el camino de que todos los rehenes restantes sean devueltos. Al expresar su condena a los últimos acontecimientos, el presidente de Israel, Isaac Herzog, dejó claro que Israel debe recordar lo que llamó su “más alta obligación: hacer todo lo posible para traer a casa a cada una de las hermanas y hermanos secuestrados”. El Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos hizo eco de esto, diciendo que “cada paso” debe tomarse con “responsabilidad cuidadosa” para garantizar el regreso seguro de todos los rehenes. Un cuarto cuerpo fue devuelto a Israel, desde Gaza, el jueves: el del activista por la paz de 84 años Oded Lifschitz. Al igual que con Ariel y Kfir Bibas, el ejército israelí dijo que los restos de Oded fueron confirmados mediante pruebas forenses.
