LeBlanc and Jennifer Aniston both nixed the idea, with Aniston saying, “It’s just because he’s a bit of a sad sack.”
More commonly, actors ask for their lines to be cut rather than scenes. Robert De Niro, for instance, has famously asked for his character’s lines to be reduced or even removed. In his first film, The Wedding Party, he played a supporting role but later insisted on being credited as “Robert De Niro” rather than “Robert Denero”, as if hoping to increase his chances of being cast in future projects.
De Niro went on to make a habit of cutting lines and scenes from his scripts. He even asked Martin Scorsese to remove a monologue he felt was unnecessary in Taxi Driver. Scorsese obliged, and the film went on to become a classic.
Actors have varying reasons for wanting their scenes cut, whether it be personal discomfort, ethical concerns, or a desire to protect their character’s integrity. Whatever the reason, it’s clear that actors have more control over their performances than we might think, and their decisions can have a significant impact on the final product we see on screen.
Un subargumento planeado de la sexta temporada tenía al personaje de Jennifer Aniston mudándose del apartamento de Monica y yéndose a vivir con el barista enamorado. El actor James Michael Tyler dijo: “Recuerdo ver el primer borrador del guion y pensar, ‘Oh hombre, nunca van a lograr que esto funcione’. No se leía bien, ni siquiera para mí. Miré a Jen y ella tampoco estaba convencida”. Los productores pronto se dieron cuenta de que era una mala idea y lo descartaron.
En The Sopranos, Drea de Matteo, también conocida como la amante de la mafia Adriana, presionó a los productores del programa para eliminar una escena antes de que la mataran en el bosque. Era una escena en la que ni siquiera aparecía.
“En el guion, Christopher fue a Tony Soprano y le dijo que yo era una informante del FBI”, recuerda De Matteo. “Así que cuando Tony me llama y dice que Silvio me recogerá, la audiencia sabe que me dirijo hacia mi muerte. Eso me molestó. El camino hacia su muerte no iba a ser de suspenso. Lo haría un poco gratuito. Luché para que esa llamada telefónica fuera eliminada. Algunos otros actores estuvieron de acuerdo y me ayudaron a argumentar mi caso. Lo quitaron, gracias a Dios. Terminaron usándolo como un flashback la siguiente temporada.”
Más recientemente, la cantante convertida en actriz Alexandra Burke pidió que se eliminara una escena particularmente angustiosa del drama distópico de Paramount+ Curfew. Burke dijo que el contenido era demasiado oscuro: “Fue el papel más desafiante que he asumido, pero había algunas cosas que no creía que pudiera hacer”, admitió. “Hablé con el productor y estuvieron de acuerdo en sacarlo. Estaba como, ‘Gracias, porque no estoy segura de que podría actuar eso. ¡Y ya has filmado escenas conmigo, cariño, así que el contrato está hecho!'”
Finalmente, para una variación más linda del tema, las negociaciones de Nicola Coughlan con Netflix y Shondaland incluyeron la producción de una edición familiar de los episodios de Bridgerton – con el único propósito de mostrárselos a su madre. Cada entrega de la comedia romántica de la Regencia, en la que Coughlan interpreta a Penelope Featherington, se le suministra en un corte alternativo con menos sexo y desnudez.
“Literalmente está escrito en mi contrato”, dice Coughlan. “La gente piensa que estoy bromeando pero crecimos como católicos irlandeses. Así no es como vibramos.” Se puede sacar a la chica de Derry …