Se han producido disparos y explosiones durante una manifestación celebrada por líderes rebeldes en una ciudad que capturaron recientemente en el este de la República Democrática del Congo. Los videos muestran escenas caóticas con cuerpos en las calles después de que la multitud huyera de la manifestación en Bukavu, la segunda ciudad más grande del este, en pánico. Las cifras de víctimas no están claras, pero la agencia de noticias AFP ha citado a una fuente hospitalaria que dice que al menos 11 personas han muerto y otras 60 están heridas. Esta fue la primera manifestación que los rebeldes respaldados por Rwanda celebraban en Bukavu desde que tomaron la ciudad a las fuerzas gubernamentales a principios de este mes después de un rápido avance por la región. Los rebeldes acusaron al gobierno del presidente Felix Tshisekedi de orquestar el ataque. Sin embargo, Tshisekedi lo atribuyó a “un ejército extranjero” que, según él, estaba operando en el este. La manifestación había sido dirigida anteriormente por Corneille Nangaa, el jefe de la alianza de grupos rebeldes que incluye al M23 respaldado por Rwanda. Prometió a la multitud que los rebeldes traerían seguridad y protección a la ciudad. “Habrá unidades y patrullas especiales que recorrerán todas las comunas”, fue citado diciendo por la agencia de noticias Reuters. Se cree que Nangaa y Bertrand Bisimwa del M23 ya se habían marchado cuando ocurrió el ataque en la plaza principal de Bukavu. En un comunicado, Nangaa dijo que dos personas habían sido arrestadas en relación con el ataque, y se estaba llevando a cabo una búsqueda de otros sospechosos. “Este acto cobarde y bárbaro no quedará impune”, dijo. Los rebeldes han estado avanzando a través del este del Congo desde enero, apoderándose de Bukavu y Goma, la mayor ciudad de la región. Los combates han obligado a unas 500,000 personas a abandonar sus hogares, empeorando una crisis humanitaria ya grave, según la ONU. La Unión Africana y la ONU han llamado a un alto el fuego y a que los rebeldes se retiren de las áreas que controlan ahora. Rwanda solía negar respaldar al M23, pero recientemente ha adoptado una postura más defensiva, diciendo que la lucha cerca de la frontera entre el Congo y Rwanda es una amenaza para su seguridad. Expertos de la ONU han estimado previamente que entre 3,000 y 4,000 soldados rwandeses están en el este del Congo.