Antes de una intervención de último minuto por parte de un juez federal, funcionarios de la administración Trump planeaban desmantelar la Oficina de Protección Financiera del Consumidor hasta que no quedara nada de la agencia más que una habitación con “cinco hombres y un teléfono”, según empleados actuales y anteriores.
Su testimonio por escrito se encontraba en documentos presentados el jueves como parte de una demanda destinada a detener los despidos masivos en la asediada agencia. Ofrecen nuevos detalles paso a paso de cómo los informantes dicen que la administración planeaba diezmar al regulador encargado de vigilar la forma en que los grandes bancos, prestamistas hipotecarios y otras compañías de servicios financieros tratan a los clientes.
También describen cómo funciones clave que la agencia está obligada a llevar a cabo según la ley federal, como operar un portal de quejas de consumidores, han dejado de funcionar en gran medida gracias a la cancelación de prácticamente todos sus contratos externos y la orden de cese emitida por el director interino Russell Vought.
La Jueza Principal Amy Berman Jackson del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito de Columbia bloqueó temporalmente a los funcionarios de Trump de despedir al personal de la CFPB hace dos semanas en respuesta a un desafío legal presentado por un sindicato que representa a empleados federales, el cual afirmaba que la administración planeaba eliminar efectivamente la agencia al terminar con el 95% de su fuerza laboral original de 1,700 empleados, finalizar sus arrendamientos y cancelar sus contratos externos.
La administración Trump está buscando levantar su orden y argumentó en una moción esta semana que solo está tratando de “racionalizar” la CFPB en lugar de eliminarla por completo, y que ha seguido manteniendo en funcionamiento sus funciones requeridas por ley.
Pero según los documentos presentados el jueves, el equipo de Trump, con el apoyo del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Elon Musk, planeaba dejar en su lugar una versión reducida de la CFPB que existía solo en nombre.
El Director de Operaciones Adam Martinez le dijo a los empleados que la agencia estaba en “modo de liquidación”, según dos de las declaraciones presentadas por empleados actuales anónimos. Altos ejecutivos explicaron al personal que “las cosas estaban claras” y presuntamente “compartieron que la intención de la dirección era despedir a todos menos los cinco cargos requeridos por la Ley Dodd-Frank, que estableció la CFPB.
“Un alto ejecutivo dijo que la CFPB se convertiría en una ‘habitación en el Tesoro, la Casa Blanca o la Reserva Federal con cinco hombres y un teléfono'”, testificó un empleado identificado como Drew Doe.
Según los documentos presentados, los funcionarios de Trump planeaban despedir al personal en tres fases, comenzando con las contrataciones recientes que estaban en período de prueba o con un límite de tiempo. Un miembro del equipo DOGE llamado Jordan Winck presuntamente ordenó al personal de la CFPB que terminara con otros 1,200 de sus trabajadores para el 14 de febrero. La mayoría de los empleados restantes serían despejados 60 a 90 días después.
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“La Oficina tenía la intención de cumplir y despedir a la gran mayoría de los empleados restantes el 14 de febrero”, escribe un empleado de la CFPB identificado como Alex Doe. “La única razón por la que no lo hizo fue por la orden temporal de este Tribunal que lo prohibía temporalmente”.
Las personas asisten a una protesta en apoyo de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor, el 10 de febrero, en la sede de la CFPB en Washington. (AP Photo/Jacquelyn Martin) · ASSOCIATED PRESS
Según las declaraciones, los funcionarios de Trump y DOGE cancelaron rápidamente alrededor de $200 millones de los $227 millones pendientes de contratos de la Oficina con proveedores externos que proporcionaban desde testimonios legales expertos hasta ciberseguridad. Algunos de los datos que mantenían esos proveedores pueden perderse de forma permanente.
“He sido oficial de contratación durante muchos años, a través de múltiples cambios de administración”, escribió un oficial de contrataciones identificado como Charlie Doe. “Los eventos de las últimas semanas son diferentes a cualquier cosa que haya visto en cualquier agencia durante cualquier cambio de administración (o en cualquier otro momento). Las instrucciones a los oficiales de contratación no reflejaban un cambio en la dirección de la política, sino más bien una terminación total de los contratos necesarios para mantener funcionando la CFPB”.
Por separado, el director de servicios digitales de la CFPB, Adam Scott, escribió en una declaración que le dijeron que Vought había tomado personalmente la decisión de eliminar la página de inicio de la CFPB.
En la presentación del gobierno ante el tribunal a principios de esta semana, Martinez, el Director de Operaciones, negó las afirmaciones de que la agencia estaba tratando efectivamente de vaciar sus propios cofres transfiriendo su efectivo de vuelta a la Reserva Federal. Pero un empleado identificado como Blake Doe lo contradijo el jueves, escribiendo en una declaración que había visto “un correo electrónico fechado el 11 de febrero de 2025, en el que el Sr. Martinez declaró que el Director Financiero Jafnar Gueye estaba en comunicación con la Reserva Federal sobre cómo devolver dinero a la Reserva Federal o al Tesoro”.
Según los documentos presentados, algunas funciones clave que la CFPB está obligada a mantener por ley ahora, como máximo, solo están funcionando parcialmente gracias a la orden de cese de Vought. Su portal de quejas de consumidores solo puede procesar automáticamente ciertas presentaciones, y alrededor de 10,000 quejas aún pueden estar esperando revisión manual, según una declaración.
El cargo de defensor de préstamos estudiantiles de la CFPB también está vacante, y su defensor general, a quien los funcionarios de la administración dijeron que asumiría la responsabilidad, supuestamente recibió la orden de no trabajar.
Una nueva audiencia en la demanda está programada para la próxima semana. El viernes, 203 miembros demócratas del Congreso presentaron un informe amicus en el caso pidiendo al tribunal que impida a la administración de Trump cerrar la CFPB “por decreto”.
Mientras tanto, a pesar de que la mayor parte del trabajo de la CFPB sigue en pausa, ha estado desestimando muchos de sus casos de cumplimiento pendientes. Después de desestimar cinco demandas el jueves, desestimó otra más, esta vez contra la agencia de calificación crediticia TransUnion, el viernes por la tarde.
Jordan Weissmann es un reportero senior de Yahoo Finance.
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