Biden aprobó una estrategia nuclear secreta en marzo que reorienta la estrategia disuasoria de América para centrarse en la rápida expansión del arsenal nuclear de China. El Pentágono cree que los arsenales de China rivalizarán con los de EE. UU. y Rusia en la próxima década. La estrategia revisada, llamada Orientación para el Empleo Nuclear, también busca, por primera vez, prepararse para posibles desafíos nucleares coordinados de China, Rusia y Corea del Norte.
El nuevo documento es un recordatorio contundente de que quien gane en noviembre se enfrentará a un panorama nuclear cambiado y mucho más volátil que el que existía hace solo tres años. En el pasado, la probabilidad de que los adversarios de EE. UU. pudieran coordinarse para superar el arsenal nuclear del país parecía remota. Pero la asociación emergente entre Rusia y China y los armamentos convencionales que Corea del Norte e Irán están proporcionando a Rusia para la guerra en Ucrania han cambiado fundamentalmente el pensamiento de Washington.