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Por Tim Reid y James Oliphant
VALDOSTA, Georgia (Reuters) – Vivian Childs, una firme partidaria de Donald Trump, instruyó a un grupo de republicanos sobre cómo ganar votantes negros en el estado de Georgia, un estado clave en las elecciones presidenciales.
Childs, una pastora baptista negra, le dijo al grupo de voluntarios y personal de campaña reunidos en la nueva oficina del ex presidente en la ciudad rural de Valdosta el mes pasado, que se centraran en las políticas económicas de Trump, en la inmigración ilegal y en la inflación. Les instó a decir a los votantes lo que Trump ha hecho por ellos y que traerá el cambio que América necesita. “Somos el partido de la esperanza”, dijo. “Somos el partido de la verdad”.
Había un ambiente de urgencia en la oficina, un gran edificio con columnas blancas y porches. Según la propia admisión de Trump, Georgia se ha convertido en un estado de obligada victoria, un estado que pensó que había asegurado hasta que Kamala Harris se convirtió en su rival demócrata en julio.
Su entrada tardía encendió un estallido de entusiasmo popular, y las encuestas de opinión en Georgia muestran a los candidatos cabeza a cabeza, un gran cambio desde principios de julio, cuando las encuestas mostraban a Trump liderando al presidente demócrata Joe Biden por hasta seis puntos porcentuales.
En particular, se está librando una intensa batalla por los votantes negros, que representan un tercio de la población del estado, la mayor proporción de votantes negros en cualquiera de los siete estados disputados que decidirán las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
El objetivo de Trump de atraer más apoyo negro no solo se ha visto complicado por la entrada de Harris, sino también por las restricciones de voto respaldadas por los republicanos que los activistas dicen que están destinadas a poner barreras a las personas de color, algo que el partido niega.
Childs, parte de la coalición nacional “Negros Americanos por Trump” de defensores, reconoció que la nominación de Harris cambió inicialmente la carrera en Georgia. “Hubo mucha emoción, absolutamente”, dijo a Reuters. “Ella es negra y mujer”.
Ella insistió en que la emoción se estaba desvaneciendo.
“Tenemos que dejar de dividir nuestro país basándonos en cómo lucimos”, agregó. “Le digo a la gente que hable con los negros de la misma manera que hablan con los blancos: miren el currículum del presidente Trump, sus políticas, lo que ha hecho por todos los estadounidenses”.
Reuters habló con tres docenas de funcionarios de campaña, presidentes de partido, grupos activistas locales y aliados que trabajan en nombre de Trump y Harris para tener una idea de la operación de cada candidato en el estado disputado que Trump perdió ante Biden por menos de 12,000 votos en las elecciones de 2020.
Un alto funcionario de la campaña de Trump, que pidió no ser identificado para discutir asuntos confidenciales, dijo que el equipo veía un particular potencial en atraer a hombres negros jóvenes que, según él, se han desencantado con los demócratas debido a los altos precios y ven mayores oportunidades económicas bajo el ex presidente.
CERDOS, MELOCOTONES Y POLÍTICA
En iglesias y ferias del condado, en puertas y redes sociales, y a través de las ondas, ambas campañas están cortejando a personas negras, un bloque de votantes que tradicionalmente ha inclinado fuertemente hacia los demócratas pero donde Trump ha estado ganando terreno, según las encuestas de opinión.
“Se ha vuelto realmente intenso en Georgia”, dijo Essence Johnson, una mujer negra que preside el Partido Demócrata en el condado de Cobb, una extensa región a las afueras de Atlanta.
De hecho, en el festival de barbacoa Pig and Peaches en el condado de Cobb, se trazaron líneas de batalla.
El puesto demócrata buscaba atraer a votantes de color con folletos sobre condonación de préstamos estudiantiles, ayuda para universidades históricamente negras y reducción de precios de medicamentos. El puesto republicano, a cien yardas de distancia, estaba repleto de folletos en español y literatura centrada en la inflación, el aborto, oportunidades económicas y fe.
“Muchos afroamericanos, asiáticos e hispanos tienen estos valores compartidos”, dijo Salleigh Grubbs, la presidenta del condado republicano, que ha estado organizando eventos en escuelas en la parte sur más racialmente diversa del condado, celebrando fiestas en hogares y tocando puertas en vecindarios predominantemente negros.
El condado de Cobb ilustra los cambios demográficos que han transformado a Georgia de un estado confiablemente republicano en un campo de batalla. Una vez un condado predominantemente blanco y republicano, ahora es 30% negro, 14% hispano y 6% asiático, un área que ayudó a Biden a ganar Georgia en 2020.
Johnson, la presidenta demócrata del condado de Cobb, dijo que la entrada de Harris en la carrera había cambiado las cosas drásticamente. “Es un reflejo en el espejo para muchos de nosotros”, dijo de Harris.
Un foro de hombres negros celebrado justo antes de que Biden pusiera fin a su candidatura a la reelección el 21 de julio atrajo a 14 asistentes, dijo ella, pero 125 personas se presentaron a otro celebrado justo después de que Harris entrara en la carrera. Sesenta personas marcaron una buena multitud en las reuniones del partido del condado cuando Biden era el candidato; 235 personas asistieron una vez que Harris se convirtió en la nominada.
Antes de que Biden abandonara, la campaña de Trump estaba tan segura de la victoria en Georgia que había gastado menos de $3 millones en compras de anuncios. Desde la aparición de Harris, la campaña y un grupo afiliado respondieron invirtiendo más de $30 millones en publicidad en el estado, superando en gasto a la campaña de Harris hasta el mes de agosto.
Ambos bandos se han comprometido a gastar más de $37 millones cada uno en Georgia hasta el día de las elecciones, según AdImpact, una firma que rastrea la publicidad política.
El Consejo Republicano Negro de Georgia, que ha respaldado a Trump, está lanzando anuncios en estaciones de radio negras en ocho áreas metropolitanas, enfocados en la inmigración, la economía y la oposición al aborto, dijo Camilla J. Moore, la presidenta del consejo.
Los anuncios de la campaña de Trump son en su mayoría negativos, atacando a Harris por la inflación, culpándola por personas que cruzan la frontera de Estados Unidos ilegalmente y acusándola de ser una liberal peligrosa.
Janiyah Thomas, directora de medios negros en la campaña de Trump, dijo que el ex presidente tenía un historial comprobado de crear oportunidades para la comunidad negra.
“Para cada afroamericano que lucha por llegar a fin de mes, nuestro mensaje es claro: voten por el candidato que ha cumplido consistentemente con sus promesas”, agregó.
En agosto y septiembre de 2019, mientras Trump era presidente, la tasa de desempleo negra alcanzó un nuevo mínimo del 5.3%. Bajo Biden, la tasa bajó aún más, al 4.8%, en 2023.
La campaña de Harris está transmitiendo anuncios centrados en propuestas para reducir los precios de los medicamentos, gravar a las grandes corporaciones y a los ultra ricos para pagar la vivienda, y exenciones fiscales para padres trabajadores.
La campaña de Harris dijo que había estado llegando a los votantes negros de Georgia “desde el primer día”.
“La vicepresidenta Harris está luchando por reducir los costos para nuestras familias, proteger nuestras libertades y asegurarse de que todos en Georgia no solo puedan salir adelante, sino prosperar”, agregó Porsha White, directora estatal de la campaña.
‘DIOS AYUDE A NUESTRAS ALMAS’
Trump obtuvo alrededor del 11% del voto negro en Georgia en las elecciones de 2020, según las encuestas a la salida de las urnas. Si lograra obtener un porcentaje más alto en noviembre, podría ganar el estado, dijo Andra Gillespie, profesora de ciencias políticas en la Universidad Emory.
Una encuesta realizada para CNN durante la última semana de agosto mostró a Harris con una ventaja de un punto porcentual en el estado, 48% – 47%, con Trump obteniendo el 10% del voto negro.
Una victoria de Trump en Georgia aliviaría la presión sobre él de ganar los tres estados disputados del Medio Oeste, Michigan, Pensilvania y Wisconsin. Pero corre el riesgo de alienar a algunos votantes con sus comentarios incendiarios sobre Harris, una mujer de ascendencia negra y asiática del sur. Trump ha cuestionado la identidad racial de la vicepresidenta.
“Dios ayude a nuestras almas si Trump gana las elecciones”, dijo Demetrious Hall Sr., de 62 años, un votante negro en Savannah que denunció la retórica racista de Trump y dijo que votaría por Harris.
Childs, aliada de Trump, restó importancia a esos comentarios en una entrevista después de la reunión de voluntarios en Valdosta, citando sus políticas económicas que, según ella, redujeron el desempleo negro, su ayuda a universidades históricamente negras y su control de la inmigración ilegal como razones para apoyarlo.
Al preguntarle cómo responde a los votantes que afirman que Trump es racista, Childs dijo: “Yo digo, ‘¿Basado en qué?'”
El gobernador de Georgia, Brian Kemp, demostró que un republicano puede aumentar su porcentaje del voto negro en 2022, cuando venció a una demócrata negra, Stacey Abrams, en parte porque el apoyo de los votantes negros aumentó 7 puntos porcentuales desde su primer enfrentamiento en 2018. Kemp se centró en la economía y los derechos de armas, dijo su ex gerente de campaña, Bobby Saparow.
Bruce LeVell, un empresario negro de Atlanta, dijo que el mensaje de Trump sobre cuestiones económicas resonaba con los votantes de color.
“Especialmente los hombres negros y algunas mujeres están realmente mirando sus billeteras”, dijo LeVell, quien organizó una mesa redonda de propietarios de negocios negros con Trump cuando visitó Atlanta a principios de agosto.
Mientras tanto, en la iglesia Embassy en Austell, en el sur del condado de Cobb, el pastor principal B. Dwayne Hardin también está difundiendo el evangelio del conservadurismo.
En un servicio reciente que comenzó con una hora de canciones de evangelio bulliciosas, Hardin dijo a su congregación negra que América se dirige hacia el socialismo, que los niños están siendo adoctrinados en las escuelas y el país “está lleno de terroristas”.
Dijo que era importante votar por personas que “sacudan las cosas”.
Después, en su oficina privada, Hardin dijo que no les dice a las personas que voten por Trump, pero que Trump está del lado correcto de los temas como la libertad individual, la elección de escuelas y el empoderamiento económico.
“No adoren al ídolo del color de piel”, dijo que les dice a su rebaño.
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