It is clear from Richardson’s post that the Russian government is actively trying to influence foreign politics, particularly in the United States. By utilizing fake social media profiles and targeted ads, they aim to spread propaganda and misinformation to serve their interests. This manipulation of information is a dangerous threat to democracy and must be taken seriously.
Furthermore, the fact that right-wing influencers in the U.S. are being targeted and used as tools for Russian propaganda is alarming. It is crucial for individuals to be aware of the sources of information they consume and to be vigilant against disinformation campaigns. The actions of these influencers, whether knowingly complicit or not, have serious consequences for the integrity of our democratic processes.
Finally, the normalization of extremist and revisionist views, such as Holocaust denial and the glorification of Nazi figures, is deeply troubling. When prominent figures like Tucker Carlson provide a platform for such dangerous ideologies, they contribute to the erosion of truth and morality in society. It is essential for responsible media outlets and individuals to stand against such harmful rhetoric and promote factual, ethical discourse.
In conclusion, it is imperative for all individuals to critically evaluate the information they encounter, reject propaganda and misinformation, and uphold the values of truth, democracy, and human rights.
Intentó volver a intentar el caso Carroll en los medios de comunicación, refutando las pruebas consideradas por el jurado y sugiriendo que la foto de él y Carroll juntos fue generada por inteligencia artificial, aunque fue publicada en 2019.
Atacar a las mujeres fue una decisión interesante a la luz del hecho de que necesitará los votos de las mujeres de los suburbios si quiere recuperar el terreno perdido ante la candidata presidencial demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, y el candidato a vicepresidente Tim Walz.
Por su parte, la ex representante Liz Cheney (R-WY) parece ver este momento tal como es. Aunque ella misma es una republicana ferviente, está instando a las mujeres conservadoras a admitir que ya han tenido suficiente. Refiriéndose tanto a Trump como a Vance en una conversación patrocinada por el Texas Tribune, dijo: “Esta es mi manera diplomática de decirlo: son unos cerdos misóginos.” Aseguró a los oyentes, con bastante precisión, que Trump “no es un conservador”. “Las mujeres de este país… ya hemos tenido suficiente.” “Estas no son personas en las que podamos confiar con el poder de nuevo.”
Su padre, el ex vicepresidente Dick Cheney, coincidió en que Trump “nunca podrá ser confiado con el poder de nuevo” y anunció hoy que votará por Harris. “Como ciudadanos, cada uno de nosotros tiene el deber de anteponer el país a la partidocracia para defender nuestra Constitución. Es por eso que emitiré mi voto por la vicepresidenta Kamala Harris”, dijo. Ochenta y ocho líderes empresariales también respaldaron a Harris hoy, incluido James Murdoch, heredero del imperio mediático de la familia Murdoch. Citando las “políticas que apoyan el Estado de Derecho, la estabilidad y un entorno empresarial sólido” de Harris, dijeron en una carta pública: “la mejor manera de apoyar la fuerza, la seguridad y la fiabilidad continuas de nuestra democracia y economía” es eligiendo a Harris como presidenta.
Mientras tanto, en su evento con Sean Hannity del canal de noticias Fox News ayer, Trump abrazó el elemento clave del Proyecto 2025 que llama a un líder dictatorial para tomar el control de los EE. UU. Ese documento mantiene que “el personal es la política” y que la forma de lograr todo lo que los nacionalistas cristianos quieren es despedir a los funcionarios civiles no partidistas actualmente en funciones y poner a su propia gente en cargos. Trump ha intentado distanciarse del Proyecto 2025, pero anoche dijo que la forma de dirigir el gobierno es “conseguir a la gente adecuada. Pones a la persona adecuada y al grupo adecuado de personas al frente de estas agencias masivas, vas a tener un éxito tremendo, y ahora conozco a la gente, y los conozco mejor que cualquier persona los conocería.”
Una de esas personas parece ser el dueño de X, Elon Musk, a quien Trump ha prometido poner al frente de una comisión de “eficiencia” para auditar el gobierno de los EE. UU.
En 1858, Abraham Lincoln, entonces candidato al Senado, advirtió que los argumentos contra la democracia y a favor de que unas pocas personas dominen al resto siempre eran los mismos. En su época, eran los esclavistas diciendo que algunas personas eran mejores que otras. Pero, dijo, esos eran los mismos argumentos “que los reyes han hecho para esclavizar a la gente en todas las épocas del mundo… Da igual de dónde venga—ya sea de la boca de un Rey, una excusa para esclavizar a la gente de su país, o de la boca de hombres de una raza como razón para esclavizar a los hombres de otra raza, todo es la misma serpiente antigua.”
En nuestra época, Indiana Jones lo dijo mejor en La Última Cruzada: “Nazis. Odio a estos tipos.”