Jane’s Addiction ha cancelado el resto de su gira de reunión. El anuncio sigue a una altercación en el escenario entre el líder Perry Farrell y el guitarrista Dave Navarro en el concierto de la banda en Boston la noche del viernes (13 de septiembre).
Un anuncio en la página de Instagram de Jane’s Addiction dice: “Para todos los fans, la banda ha tomado la difícil decisión de tomar un tiempo como grupo. Como tal, cancelarán el resto de la gira”.
Una declaración separada, publicada en las páginas personales de Navarro y sus compañeros de banda Eric Avery y Stephen Perkins, ofrece más información:
Debido a un patrón continuo de comportamiento y las dificultades de salud mental de nuestro cantante Perry Farrell, hemos llegado a la conclusión de que no tenemos otra opción que discontinuar la actual gira por Estados Unidos.
Nuestra preocupación por su salud y seguridad personal, así como la nuestra, no nos ha dejado alternativa. Esperamos que encuentre la ayuda que necesita.
Lamentamos profundamente no poder cumplir con todos nuestros fans que ya han comprado entradas. No vemos ninguna solución que garantice un entorno seguro en el escenario o que nos permita ofrecer una gran actuación de manera confiable a diario.
Nuestros corazones están destrozados.
Dave, Eric y Stephen
Love and Rockets, quienes estaban abriendo la gira, escribieron: “Nos habría encantado completar el resto de las fechas de la gira con Jane’s Addiction, pero desafortunadamente el asunto está fuera de nuestras manos”.
Tras el incidente, la esposa de Perry Farrell, Etty Lau Farrell, escribió en Instagram que “claramente había habido mucha tensión y animosidad entre los miembros… la magia que hacía que la banda fuera tan dinámica. Bueno, la dinamita se encendió. Perry se levantó en la cara de Dave y lo empujó”.
Farrel continuó: “La frustración de Perry había estado creciendo, noche tras noche, sentía que el volumen en el escenario estaba extremadamente alto y su voz estaba siendo ahogada por la banda. Perry había estado sufriendo de tinnitus y dolor de garganta todas las noches. Pero cuando la audiencia en la primera fila comenzó a quejarse hasta insultar a Perry diciendo que la banda estaba demasiado fuerte y que no podían escucharlo, Perry perdió el control”.
Farrel también señaló que Avery “puso a Perry en una llave de cabeza y lo golpeó en el estómago tres veces… Perry fue una bestia enloquecida durante la próxima media hora, finalmente no se calmó, pero sí se desmoronó y lloró y lloró. Eric, bueno, o no entendió lo que significaba la desescalada o se aprovechó de la situación y le dio algunos golpes baratos a Perry”.
En una declaración propia, Perry Farrel dijo: “Este fin de semana ha sido increíblemente difícil y después de tener el tiempo y el espacio para reflexionar, es justo que me disculpe con mis compañeros de banda, especialmente Dave Navarro, los fans, la familia y amigos por mis acciones durante el concierto del viernes. Desafortunadamente, mi punto de quiebre resultó en un comportamiento inexcusable, y asumo total responsabilidad por cómo elegí manejar la situación”.