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Malas noticias para 2025: Después de años de agotamiento no abordado, exceso de trabajo y sistemas de apoyo defectuosos, está previsto que golpee el lugar de trabajo un “colapso de los gerentes”.
Esa es una de las cuatro principales predicciones establecidas por meQuilibrium, una plataforma de coaching digital destinada a fortalecer el bienestar laboral. (Las otras tres: la preparación para el cambio se convierte en una prioridad; las ventajas del bienestar en el trabajo remoto se erosionan lentamente; y los Gen Zers tienen más dificultades para adaptarse al cambio que sus compañeros mayores).
“Como un colapso del mercado, veremos una disminución significativa en el bienestar de los gerentes, su desempeño y su capacidad para seguir siendo los campeones del cambio”, escribió Alanna Fincke, líder de contenido y aprendizaje de meQuilibrium, en el informe.
“Si nadie se preocupa por los gerentes, tendrán un mayor riesgo de agotamiento y rotación que las personas a las que supervisan”, enfatizó Fincke.
La predicción no es del todo sorprendente. Los gerentes intermedios, trabajadores no ejecutivos que supervisan a otros trabajadores, son históricamente menos propensos que sus equipos a sentirse apoyados por sus superiores. Sin embargo, la insatisfacción en la gerencia intermedia es particularmente peligrosa porque los gerentes felices y alentados actúan como un “multiplicador de fuerza crucial” para el éxito de toda la organización, escribió meQuilibrium.
Realmente no puedes permitirte perder a tus gerentes de nivel medio
Para evitar el “colapso” inminente, los líderes de las organizaciones deben tomar medidas decisivas antes del nuevo año para dejar claro la importancia del bienestar mental. Es una búsqueda que vale la pena, explicó Fincke: “Los beneficios se propagarán por toda la organización, mejorando la productividad, la innovación y la salud general de la fuerza laboral”.
De la misma manera, si no se aborda el tsunami de agotamiento que se avecina para la gerencia, su estrés se filtrará hacia abajo. Los empleados que no se sienten apoyados por sus gerentes tienden a tener dificultades durante períodos de transformación. Los trabajadores, en cualquier nivel, tienen más de cuatro veces más probabilidades de renunciar a sus trabajos y el doble de probabilidades de informar un bienestar general deficiente cuando no se sienten apoyados, advirtió Fincke.
Las perspectivas no son prometedoras. El sentimiento de los empleados ha caído en picado este año en general, pero la confianza entre los gerentes intermedios alcanzó su peor lectura en febrero, según Glassdoor. Es porque “los gerentes intermedios están bajo presión para hacer más con menos”, dijo en ese momento el economista jefe de Glassdoor, Daniel Zhao. Y presenciar todos los despidos de gerentes intermedios ha dejado a los trabajadores restantes “cada vez más pesimistas sobre las perspectivas de sus empleadores”, agregó Zhao.
Los gerentes intermedios la han pasado peor, y Gen Z se está dando cuenta
El agotamiento es un problema constante para los gerentes intermedios, lo cual no debería sorprender.
A menudo se encuentran en la posición imposible de apaciguar a ejecutivos exigentes y calmar las preocupaciones y necesidades de los trabajadores de nivel de entrada. No es de extrañar que casi la mitad de los gerentes intermedios encuestados en un informe de UKG de 2023 dijeron que es probable que renuncien en el año debido al estrés del cargo.
“Ponemos tanta presión en el gerente, y no les damos suficiente apoyo”, dijo a Fortune Pat Wadors, directora de personas de UKG, describiendo una receta para el exceso de trabajo y el agotamiento.
Brindar un apoyo amplio y constante a los gerentes intermedios, a menudo olvidados, es sorprendentemente efectivo para evitar el agotamiento, y es especialmente significativo para los trabajadores, que rinden mejor cuando se sienten defendidos. “No puedes esperar que lideren si no se sienten apoyados, y no hay nadie que los respalde”, dijo Tapaswee Chandele, vicepresidente global de talento, desarrollo y asociaciones de sistemas en The Coca-Cola Company, en la conferencia Impact Initiative de Fortune en 2023.
Pero incluso si los gerentes intermedios resisten, con agotamiento y todo, los problemas siguen llegando.
El año pasado, los roles de gerencia intermedia comprendieron casi un tercio de todos los despidos, según un informe de Bloomberg, frente a un quinto cinco años antes. (No hay que buscar más allá del declarado “Año de la Eficiencia” de Mark Zuckerberg para Meta, que se centró en gran medida en “adelgazar” los niveles de gestión de la empresa).
Si estos problemas no se abordan en el nuevo año, las empresas podrían enfrentarse pronto a una escasez de gerentes intermedios. La naturaleza poco atractiva de un rol de gerencia intermedia se ha vuelto difícil de ocultar, y a medida que los líderes actuales renuncian, los trabajadores de nivel de entrada se están desanimando ante la perspectiva de asumir el cargo.
Casi tres cuartas partes de los trabajadores de la Generación Z preferirían avanzar en sus carreras como contribuyentes individuales en lugar de ascender y convertirse en gerentes, resaltó un estudio reciente de la firma de reclutamiento Robert Walters. Más de un tercio de los encuestados que, no obstante, creen que algún día serán gerentes, admitieron que no estaban deseando hacerlo. Claramente, tienen buenas razones.
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