Decenas de miles de maestros podrían ser añadidos a la fuerza laboral del estado el próximo año escolar debido a una decisión de la Comisión de Credenciales de Maestros de California de ofrecer a los candidatos a maestros que casi pasan su evaluación de desempeño docente la oportunidad de obtener una credencial preliminar sin tener que volver a tomar el examen.
Comenzando a principios del próximo año, los candidatos a maestros que se quedan dentro de -1.0 error estándar de medición —generalmente alrededor de dos o tres puntos— de pasar tanto la Evaluación de Desempeño Docente de California como el edTPA, pueden obtener su credencial si su programa de preparación determina que están listos, votaron los comisionados el viernes. Esta decisión no afectará a los candidatos a maestros que tomen la Evaluación de Maestros en Práctica de Fresno.
“Para ser claros, la recomendación no está proponiendo bajar el estándar, sino que ampliaría las formas en las que los candidatos podrían demostrar su preparación para comenzar a enseñar”, dijo Amy Reising, directora adjunta de la comisión el viernes.
Las evaluaciones de desempeño son necesarias para obtener una credencial de enseñanza en California. Los candidatos demuestran su competencia al presentar evidencia de su práctica instructiva a través de videoclips y reflexiones escritas sobre su práctica. Los candidatos a maestros que seleccionan el CalTPA deben completar dos evaluaciones o ciclos.
“El estándar de aprobación secundario estaría dirigido a los candidatos que quedaron justamente cortos de los estándares de aprobación actuales establecidos para estas evaluaciones, pero que pueden haber demostrado estar listos para el aula a través de otras medidas a nivel local y dentro de sus programas”, dijo Reising.
Los programas de preparación pueden recomendar a los candidatos elegibles para una credencial preliminar documentando que han demostrado competencia en cada uno de los siete dominios de las Expectativas de Desempeño Docente del estado, según la comisión.
La decisión se tomó después de que los comisionados revisaran un informe en su reunión de octubre que reveló que la mayoría de los candidatos a maestros que fallaron en las evaluaciones de desempeño en los últimos cinco años estaban muy cerca de aprobar. Si el nuevo estándar se hubiera utilizado en los últimos dos años, 2,000 de los 2,731 candidatos a maestros que no pasaron el ciclo uno del CalTPA, 953 candidatos de los 1,152 que no pasaron el ciclo 2 del CalTPA, y 360 de los 1,124 candidatos que no pasaron el edTPA habrían aprobado la evaluación y obtenido una credencial, según la comisión.
Los candidatos a maestros cuya puntuación es demasiado baja en su evaluación de desempeño para aprovechar el estándar de aprobación secundario pueden trabajar con su programa de preparación de maestros para revisar o volver a presentar su trabajo, dijo Anita Fitzhugh, portavoz de la comisión. La evaluación se puede enviar en cualquier momento sin costo alguno porque el estado ha eximido las tarifas. Se tarda aproximadamente tres semanas en recibir una puntuación.
El personal de la comisión también planea trabajar con los programas de preparación de maestros para desarrollar un proceso formal para identificar y apoyar a los programas con bajos índices de aprobación en las evaluaciones de desempeño de maestros, según los informes del personal.
Una escasez persistente de maestros ha presionado al estado a eliminar obstáculos para obtener una credencial de enseñanza. En julio de 2021, una legislación dio a los candidatos a maestros la opción de tomar cursos aprobados en lugar del Examen de Habilidades Educativas Básicas de California, o CBEST, o los Exámenes de Materias para Maestros de California, o CSET.
El nuevo plan de la comisión no está exento de controversia. Una preocupación de los oradores en la reunión del viernes fue que la decisión socavaría el Proyecto de Ley del Senado 488, que requiere que la comisión reemplace la Evaluación de Competencia en Instrucción de Lectura por una evaluación de desempeño docente.
El personal de la comisión dijo que el estándar de aprobación secundario para las dos evaluaciones de desempeño no afectará la evaluación de competencia en lectura que está en desarrollo y se espera que se pruebe en la primavera y se someta a pruebas de campo el siguiente año escolar.
“Un estudio de establecimiento de estándares separado se llevará a cabo en la primavera de 2025 para recomendar los estándares de aprobación para la evaluación de competencia en lectura”, dijo Reising en un correo electrónico el lunes.
Según el personal de la comisión, un grupo de trabajo compuesto por maestros, administradores, maestros mentores y profesores universitarios se reunirá en julio para estudiar y hacer recomendaciones sobre cómo mejorar las tres evaluaciones de desempeño del estado. Se considerarán las mejores prácticas, los desafíos de la implementación y cómo garantizar una calificación fiable.
Más de 50 personas presentaron comentarios a la comisión sobre las evaluaciones de desempeño del estado. La mayoría instó a los comisionados a eliminar o revisar las evaluaciones de desempeño.
“Las evaluaciones de desempeño docente son muy subjetivas, dependiendo de quién está calificando la evaluación; las explicaciones basadas en rúbricas y la retroalimentación sobre los resultados son muy vagas”, dijo Aly Gerdes, maestra en el Distrito Escolar Primario Evergreen en San José. “Sinceramente no veo el valor inherente en CalTPA y creo que debe ser eliminado o reemplazado por algo que valga la pena y que haga más que añadir un estresor adicional a la vida de los candidatos a maestros”.
Muchos oradores y escritores de cartas dijeron que la evaluación de alto riesgo es perjudicial para los candidatos a maestros.
“A nivel personal, el estrés y la presión asociados con el TPA pueden ser abrumadores”, escribió la maestra Cheena Molsen.
“El peso de las evaluaciones de alto riesgo puede afectar negativamente el bienestar y la moral de los educadores, potencialmente disminuyendo su efectividad en el aula. El impacto que tiene en la vida personal de los maestros no debe subestimarse, ya que la búsqueda de la excelencia en la educación no debería ser a expensas del bienestar mental y emocional de los educadores”.