Incendios en Los Ángeles: “Todo ha desaparecido” – Agonía en una calle unida reducida a cenizas.

El chef profesional Daron Anderson siempre dice a la gente que nació “en la cocina” – literalmente.
El hombre de 45 años nació en casa en 295 West Las Flores Drive, donde vivió con su madre hasta esta semana.
El jueves, caminó sobre escombros carbonizados donde una vez estuvo su cocina en Altadena, un vecindario unido del noreste de Los Ángeles.
Estaba buscando sus sartenes de hierro fundido con la esperanza de que pudieran haber sobrevivido al incendio, uno de varios incendios históricos en la zona que han matado al menos a 16 personas y devastado múltiples comunidades y dejado a miles sin hogar.
Al otro lado de la calle – en el número 296 – la casa de su amiga Rachel también está en cenizas. La casa de al lado – 281 – donde disfrutaba de fiestas familiares, ya no existe.
A unas tres cuadras de distancia, en Devirian Place, donde vivía su novia, algunos vecinos intentaron detener las llamas rugientes que consumirían sus hogares con mangueras de jardín.
Ahora también están buscando objetos preciados entre los escombros, después de que el fuego arrasara toda esta comunidad ubicada a la sombra de las montañas de San Gabriel.
Todo comenzó el martes por la noche.

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