La prohibición llega en un momento de gran preocupación en los Estados Unidos sobre el espionaje chino.
Las empresas de ciberseguridad han sugerido que la aplicación es capaz de recopilar datos de los usuarios más allá de lo que ven en TikTok.
El Fiscal General de los Estados Unidos, Merrick Garland, dijo que los regímenes autoritarios no deberían tener “acceso sin restricciones” a los datos de los estadounidenses y que la decisión evitaba que China “utilizara TikTok como un arma para socavar la seguridad nacional de Estados Unidos”.
China promulgó una ley en 2017 que obliga a los ciudadanos chinos que viven en el extranjero a cooperar con su aparato de inteligencia.
Pero Beijing ha negado que presione a las empresas para recopilar información en su nombre y criticó la prohibición. TikTok ha destacado repetidamente que no se le ha pedido su información.
La aplicación argumentó que la ley pone en peligro la libertad de expresión y afectaría a sus usuarios, anunciantes, creadores de contenido y empleados. TikTok tiene 7.000 empleados en Estados Unidos.
Noel Francisco, abogado de TikTok y ByteDance, dijo a la Corte Suprema durante los argumentos que la aplicación era “una de las plataformas de discurso más populares de Estados Unidos” y dijo que la ley requeriría que “se apague” a menos que ByteDance vendiera la aplicación.
Tras la decisión, el CEO de la aplicación publicó en TikTok y dijo: “Esta es una firme defensa de la Primera Enmienda y en contra de la censura arbitraria.
“Estamos agradecidos y contentos de contar con el apoyo de un presidente [Trump] que realmente entiende nuestra plataforma.”