La cantidad de ayuda humanitaria que ingresó a Gaza aumentó drásticamente el domingo, con más de 630 camiones ingresando al enclave empobrecido y hambriento en el primer día del alto el fuego, según funcionarios de las Naciones Unidas, la cifra más alta desde el inicio de la guerra hace más de 15 meses. El alto el fuego permitió al Programa Mundial de Alimentos de la ONU “traer ayuda alimentaria urgentemente necesaria a gran escala y comenzar a sacar al territorio devastado por la guerra del hambre”, dijo la agencia en un comunicado el domingo. Tom Fletcher, jefe de ayuda de la ONU, dijo en un comunicado el lunes que más de 300 de los camiones fueron a Gaza del norte, donde la ayuda había sido más escasa y los funcionarios humanitarios habían advertido de una posible hambruna. Durante la guerra, menos de 100 camiones por día habían ingresado al enclave, y en ocasiones las entregas se habían suspendido. Las agencias de ayuda acusaron a Israel de restringir excesivamente las entregas con inspecciones rigurosas y el cierre de los cruces fronterizos, lo que Israel negó, y dijeron que se necesitaban al menos 200 camiones por día para proporcionar alimentos, medicamentos, combustible, agua potable y otros artículos esenciales. Con el alto el fuego entre Israel y Hamas entrando en vigor, los convoyes de ayuda parecían entrar en Gaza sin problemas, y no se reportaron intentos de robo o saqueo de la ayuda el domingo o el lunes, según Juliette Touma, portavoz de la principal agencia de la ONU que ayuda a los palestinos. Agregó que agentes de policía locales estaban presentes en algunas partes de Gaza para asegurar los convoyes, mientras que en otras áreas no se necesitaba seguridad. Agentes de policía uniformados y combatientes armados, raramente vistos en público durante la guerra, eran visibles en ciudades y pueblos de toda Gaza después de que entrara en vigor el alto el fuego. Fue una demostración aparente de Hamas, que había controlado el enclave durante años, de que aún está a cargo y planea mantener el poder. Vídeos publicados en redes sociales mostraron convoyes conduciendo por Gaza el domingo, mientras la gente se reunía tranquilamente en los márgenes de las carreteras, evitando acercarse a los camiones. Fue un marcado contraste con las escenas apocalípticas de las entregas de ayuda en tiempos de guerra, cuando multitudes desesperadas se apiñaban y subían a los camiones con la esperanza de conseguir un paquete de alimentos o una bolsa de harina, a veces resultando en violencia. “Lo que fue muy notable es que ninguno de los camiones que ingresaron ayer fue saqueado”, dijo Nebal Farsakh, portavoz de la Media Luna Roja Palestina. “Y esta fue la primera vez en 15 meses que tantos camiones entraron en Gaza”, agregó. Lo que fue menos claro fue cómo se estaba distribuyendo de manera eficiente y equitativa la ayuda después de ingresar a Gaza, y algunos residentes dijeron que aún no han recibido ni siquiera visto la ayuda. La Sra. Touma dijo que el personal de la UNRWA y los trabajadores de ayuda de otras agencias aún estaban clasificando la ayuda que ha llegado desde el domingo antes de que finalmente se entregue a las personas. “Es el segundo día del alto el fuego y dijeron que llegaron ayuda y harina, pero desafortunadamente todavía no hemos visto nada”, dijo Moustafa al-Aloul, de 22 años, del norte de Gaza. “Actualmente, los mercados literalmente no tienen nada”, añadió. El ministerio de desarrollo social de Gaza, parte de la administración liderada por Hamas, dijo en un comunicado el lunes que había “hecho todas las preparaciones para recibir ayuda” y proporcionará todos los permisos necesarios para que las organizaciones de ayuda reciban y distribuyan la ayuda. “El trabajo se realizará de manera coordinada entre todos los socios para garantizar la distribución justa de la ayuda a todos los ciudadanos”, dijo el ministerio, agregando que la ayuda se proporcionará a las familias dentro y fuera de los centros de refugio y campamentos de tiendas de campaña. Los funcionarios israelíes han acusado a Hamas de acaparar suministros esenciales para servir a sus propios miembros y ejercer control sobre la población, y ha habido informes de especuladores que se apoderan de la ayuda y la venden en el mercado negro. Los funcionarios de ayuda dicen que la solución es poner fin a la escasez. La Sra. Touma dijo que los convoyes que ingresaron a Gaza incluyeron algunos camiones que llevaban mercancías comerciales para la venta, que rara vez llegaron a Gaza durante la guerra. “Había varios bienes que la gente da por sentado que faltaban mucho en el mercado”, dijo la Sra. Touma en una entrevista el lunes. “Así que es muy bueno que también hayan llegado suministros comerciales porque no se puede convertir a los dos millones de personas en Gaza en una nación que dependa únicamente de la ayuda”, añadió. El Programa Mundial de Alimentos dijo que el domingo entregó comidas listas para comer y bolsas de harina de trigo. Su objetivo es enviar al menos 150 camiones de alimentos a Gaza todos los días, junto con otros suministros, así como reponer las panaderías y proporcionar suplementos nutricionales a los niños que enfrentan desnutrición. Ameera Harouda contribuyó con el reportaje desde Qatar, Matthew Mpoke Bigg desde Londres y Vivian Yee desde El Cairo.
