Las fuerzas israelíes mataron a un comandante senior de Hezbollah el miércoles en un ataque con drones en el sur del Líbano, lo que llevó a la milicia libanesa a retaliar con una fuerte lluvia de cohetes al otro lado de la frontera. El enfrentamiento se produjo mientras diplomáticos occidentales trabajaban para evitar una guerra a gran escala entre Israel y Hezbollah, una situación que parece haber aumentado en las últimas semanas. Los intercambios de fuego en la frontera se han intensificado, y funcionarios israelíes han hablado públicamente de cambiar su enfoque militar de Hamas en la Franja de Gaza a Hezbollah, una amenaza mucho más avanzada y potente. Amos Hochstein, un asesor principal de la Casa Blanca que se ha convertido en el enviado de facto de Estados Unidos para calmar el conflicto entre Israel y Hezbollah, se reunió el miércoles con funcionarios franceses en París para discutir cómo mitigar las crecientes tensiones. Jean-Yves Le Drian, enviado especial del presidente Emmanuel Macron a Líbano, estuvo entre las personas con las que se reunió, según una persona cercana a las conversaciones, que habló bajo condición de anonimato para discutir diplomacia sensible.
