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A medida que los diputados conservadores sobrevivientes trataban de comprender la magnitud de la peor derrota del partido el viernes, la atención se centró en la pregunta de cómo reconstruir el partido, comenzando por su liderazgo.
En su discurso final, Rishi Sunak asumió “responsabilidad por esta derrota” y anunció que renunciaría como líder conservador una vez que se establecieran los arreglos formales para seleccionar a su sucesor.
La amplitud de las pérdidas en el día de las elecciones sacudió la lista de posibles candidatos, adelgazando un campo de candidatos que habían estado luchando por semanas, si no meses, por posicionarse en la carrera esperada.
Kemi Badenoch
Los corredores de apuestas han nombrado a la secretaria saliente de negocios y comercio como la favorita inicial para suceder a Sunak. La mujer de 44 años, que fue elegida por primera vez como diputada en 2017, ganó su circunscripción de North West Essex a pesar de una caída del 26 por ciento en la participación de votos del Partido Conservador. Ocupa posiciones populares entre la derecha del partido en temas como el Brexit y cuestiones de género, pero también es vista como alguien que podría unir el flanco con el centro del partido.
Tom Tugendhat
El diputado centrista de Tonbridge podría ganar favor si el partido elige priorizar la recuperación de antiguos escaños conservadores perdidos ante los Liberales Demócratas. Un ex reservista del ejército que sirvió en Iraq y Afganistán, Tugendhat fue más recientemente ministro de seguridad y anteriormente fue presidente del comité selecto de asuntos exteriores. Se postuló para el liderazgo como conservador de “Una Nación” tras la renuncia de Boris Johnson, pero fue eliminado temprano.
La líder de la Cámara de los Comunes saliente, Penny Mordaunt, previamente vista como la favorita entre las bases del Partido Conservador, perdió su escaño en Portsmouth North, mientras que el ex secretario de defensa Grant Shapps, otra figura que se esperaba que se postulara, también fue derrotado por el Partido Laborista en Welwyn Hatfield.
Una pregunta crítica en discusión es quién actuará como líder interino entre la renuncia de Sunak y la selección de un nuevo líder. Oliver Dowden, el saliente viceprimer ministro, ha señalado a amigos que no está interesado en asumir el cargo, creyéndose demasiado asociado con el liderazgo de Sunak.
Una serie de nombres alternativos está circulando entre los conservadores que fueron reelegidos, incluidos los ex ministros del gabinete Mel Stride, Steve Barclay y David Davis.
La junta del partido se reunirá el lunes para discutir los próximos pasos, mientras que el comité 1922 de diputados conservadores de la retaguardia se reunirá el martes, cuando los parlamentarios presten juramento en la Cámara.
Suella Braverman
La ex secretaria de Interior fue despedida en noviembre después de provocar una gran indignación al describir el dormir en la calle como una “elección de estilo de vida” y criticar el manejo de la policía metropolitana de las protestas pro palestinas. En la víspera de las elecciones, lanzó un ataque feroz al gobierno de Sunak, al que acusó de llevar al partido “al borde del precipicio”. Es probable que se presente como una candidata firmemente de derecha y dura en inmigración que podría hacer las paces con Reforma, e incluso permitir que Nigel Farage se una al partido.
Priti Patel
Otra ex secretaria de Interior, Patel ha rechazado la idea de aliarse con Farage, pero podría rivalizar con Braverman al apelar a la derecha del partido. Mantuvo su escaño en Essex a pesar de la presión tanto del Partido Laborista como de Reforma. Patel, elegida por primera vez en 2010, fue destituida del gabinete por Theresa May en 2017 después de mantener reuniones no autorizadas con el gobierno israelí, pero regresó al frente bajo Johnson. Más tarde se convirtió en arquitecta de la divisiva política del gobierno de enviar solicitantes de asilo a Ruanda, pero renunció después de que Truss se convirtiera en primera ministra.
El comité jugará un papel crucial en establecer los términos de la contienda por el liderazgo, convirtiendo la elección del presidente del 1922 en un acontecimiento ampliamente escrutado por derecho propio. El ex secretario de Cultura John Whittingdale, el ex vicepresidente del partido Bernard Jenkin y el veterano diputado Geoffrey Clifton-Brown son vistos como los favoritos.
Algunos altos cargos conservadores están presionando por una contienda prolongada, argumentando que debería lanzarse en la conferencia conservadora en octubre y concluir a finales de año.
En 2005, la decisión de Michael Howard de permanecer como líder después de la derrota del partido en mayo hasta diciembre, para facilitar una contienda larga, fue vista como un factor crucial en la victoria de David Cameron, el underdog, para sucederlo.
“Me gustaría que Sunak hiciera un Howard y se quedara, pero no espero que lo haga”, dijo un diputado sobreviviente, que abogó por una contienda prolongada.
Robert Jenrick
Un ex secretario de Vivienda, Jenrick respaldó la permanencia en el referéndum de 2016, pero desde entonces se ha inclinado hacia la derecha, especialmente en inmigración, después de ocupar un cargo ministerial al respecto. Renunció al gobierno de Sunak el año pasado después de quejarse de que la política de Ruanda era demasiado tímida. Jenrick es ahora el último diputado conservador en Nottinghamshire después de retener su escaño en Newark.
James Cleverly
Reservista del ejército por más de 30 años, el diputado pro-Brexit reemplazó a Braverman en el Ministerio del Interior, habiendo servido previamente como secretario de Relaciones Exteriores. Cleverly fue un estrecho aliado de Johnson, habiendo trabajado con él en el Ayuntamiento, y fue nombrado presidente del partido conservador durante su mandato. Figura afable, es visto como un potencial candidato de unidad.
La composición del humillado partido conservador parlamentario, que cayó a solo 121 diputados, una caída dramática desde los 365 en 2019, también tendrá un gran impacto en la contienda.
Noventa y cinco diputados conservadores fueron reelegidos, mientras que 26 recién llegados ganaron un escaño por primera vez, incluidos el ex jefe de gabinete de Theresa May, Nick Timothy, y Katie Lam, ex asesora especial de Suella Braverman.
En general, la gravedad en el partido parlamentario ha cambiado hacia el centro después de la derrota de muchos diputados de derecha de Red Wall, y la salida de antiguos aliados de Boris Johnson, según la evaluación de los funcionarios del partido.
Si la contienda por el liderazgo sigue las reglas habituales, los diputados conservadores tendrán el poder de elegir a los dos finalistas en la papeleta, con votos emitidos luego por los miembros del partido, que suman alrededor de 175,000. Mientras que los centristas pueden estar bien representados entre el partido parlamentario, los miembros tienden significativamente más hacia la derecha.
Se espera que el ex canciller Jeremy Hunt, que superó algunas previsiones para aferrarse por poco contra un desafío de los Liberales Demócratas en su circunscripción de Surrey, sea influyente en la competencia.
Jeremy Hunt
El canciller saliente ha minimizado las sugerencias de que podría postularse para el liderazgo, pero ha recibido elogios generalizados por su mano firme en el Tesoro. Hunt, centrista, fue subcampeón de Johnson en la contienda para reemplazar a May en 2019, y se postuló nuevamente en 2022, aunque su candidatura no ganó tracción. Se aferró a su escaño en la rica ciudad dormitorio de Surrey de Godalming por poco menos de 900 votos.
Victoria Atkins
Ex abogada, Atkins fue nombrada secretaria de Salud en noviembre después de etapas anteriores en el Tesoro y el departamento de Justicia. Ha sido considerada como una posible abanderada de los moderados del partido, una posición que se ha consolidado con el fracaso de Mourdant y Shapps en retener sus escaños. Se informó que Oliver Dowden, ex viceprimer ministro, respaldó a Atkins en privado, diciendo que era una “estrella” que podría liderar el partido.
Algunos diputados conservadores se preguntaron el viernes si Hunt mismo podría intentar otra carrera por el liderazgo, a pesar de su posición senior en la administración conservadora saliente y sus vínculos con su derrota. Un aliado dijo que no esperaban que los diputados instaran al ex canciller a postularse.
Los diputados y los insiders de todas las alas del partido coincidieron en que el espectro de Nigel Farage se cernirá sobre la contienda por el liderazgo conservador. Una línea divisoria importante entre los candidatos será si estarían dispuestos a dar cabida a él en el Partido Conservador.
Una figura conservadora moderada advirtió: “La contienda por el liderazgo estará dominada por una pregunta: ¿cómo vencer a Reforma? Psefológicamente no hay camino de regreso al poder sin reunir el voto de derecha”.
El insider predijo que los candidatos al liderazgo en la imagen de Farage, “hombres del sur, blancos, elegantes”, tendrían más dificultades para persuadir a los miembros de que son la elección correcta para enfrentarse al carismático líder de Reforma UK que los candidatos femeninos y no blancos.
Un estado de resignación cansada sobre las fortunas del partido y el debate que se avecina ha invadido a los diputados conservadores.
Un ex ministro conservador dijo: “Estamos a punto de sumergirnos en una gran pelea sobre ideología, pero a los votantes no les importa, les importa la competencia. Perdimos porque fuimos incompetentes, no cumplimos”.
Otro ex portavoz señaló a Braverman específicamente por críticas, después de que publicara un artículo de opinión criticando al partido en la víspera de las elecciones, añadiendo: “Estas personas locas que piensan que es una buena idea subir al escenario nacional y protestar son increíblemente irritantes”.
Shapps criticó el viernes la “telenovela” conservadora que había alejado a los votantes, que dijo había involucrado rivalidades y divisiones internas “cada vez más indulgentes”. Advirtió que había un peligro de que el partido ahora pudiera “irse por algún camino, condenándonos a años de oposición anodina”.
En las cenizas de la derrota de los Conservadores, la ira brotó entre los diputados conservadores y activistas derrocados que culparon a los jefes del partido por su parte en ello.
Algunos de los ataques se dirigieron a la sede de campaña del Partido Conservador. “Los candidatos están disgustados con CCHQ, que retiró a personas de escaños que podrían haber sido ganados” para hacer campaña en otras circunscripciones, dijo un alto funcionario del partido.
Citaron el ejemplo de Hendon, que los Tories perdieron por solo 15 votos. A los activistas se les “pidió que dejaran de hacer campaña allí hace dos semanas”, dijo la persona.
Muchos candidatos también se quejaron en privado de la decisión de Sunak de convocar a unas elecciones anticipadas para julio en un momento en que el partido estaba 20 puntos por detrás del Partido Laborista en las encuestas de opinión, en lugar de esperar a que llegara un viento potencialmente más favorable.
Los diputados sobrevivientes que miran hacia el futuro dijeron que esperaban que los candidatos de bajo perfil tomaran la iniciativa y anunciaran sus campañas rápidamente, posiblemente incluso durante el fin de semana, mientras predijeron que figuras más establecidas podrían retrasarse.
Quien suceda a Sunak como líder, el camino del partido de regreso al poder es largo y empinado, y está lejos de estar garantizado. El ex líder conservador William Hague emitió una advertencia sobria a sus colegas el viernes: “No imaginen que la recuperación es inevitable”.
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