In April 2022, a draft Ukraine-Russia treaty was released, revealing the challenges faced in achieving peace in the midst of a prolonged war. The negotiations, which took place from February to April 2022, highlighted the divergent demands of both countries, including issues surrounding Crimea’s status, weapons levels, and language laws. While initial progress was made in excluding Crimea from the treaty, key disagreements on military alliances and territorial sovereignty remained unresolved.
Despite the failure of these initial talks, the possibility of future negotiations looms as Ukraine prepares to host a peace conference. Russia’s demand for Ukraine to hand over certain territories and abandon its NATO aspirations, coupled with Ukraine’s insistence on the withdrawal of Russian forces from its territory, illustrates the significant obstacles to peace. Both sides remain entrenched in their positions, with no clear resolution in sight.
The leaked documents shed light on the complexities of the negotiations, with proposals and counterproposals revealing the deep divide between Russia and Ukraine. The documents, dated March 17 and April 15, 2022, detail the competing terms put forth by each side, as well as a summary of the proposed deal from in-person talks in Istanbul on March 29.
Despite the challenges, some progress was made towards a compromise, as noted by a member of Ukraine’s negotiating team. However, with Russia’s swift invasion and subsequent resistance from Ukraine, achieving a peaceful settlement remains elusive. The talks, which began just days after the war’s outbreak, marked a historic moment in direct dialogue between the two conflicting parties, signaling a potential pathway to peace amid the ongoing conflict. However, to the surprise of the Ukrainians, the Russians they were negotiating with seemed unaware of the severity of their troops’ performance. The photo captured Ukraine’s defense minister, Oleksii Reznikov, alongside Vladimir Medinsky, an adviser to President Vladimir Putin, and Russian official Leonid Slutsky in Belarus. Despite Reznikov’s claim that 3,000 Russian soldiers had been killed in action, Medinsky and top Russian military official Aleksandr Fomin insisted that only 80 soldiers had died.
The negotiations then transitioned to video calls, with the Ukrainians connecting from either a conference room at President Zelensky’s office or an underground bunker. Ukraine made a significant concession by offering to become a permanently neutral state that would not join NATO or allow foreign forces on its soil, addressing Putin’s concern that the West was using Ukraine against Russia.
A draft treaty dated March 17 revealed the vast differences between the two sides, with Ukraine seeking international security guarantees and Russia demanding the lifting of sanctions and territorial concessions from Ukraine. The negotiations in Istanbul on March 29 appeared to be a breakthrough, with Russia showing support for Ukraine’s proposed neutrality and security guarantees. The proposed Istanbul Communiqué outlined a potential path to peace, including a gradual resolution of the Crimea issue and a meeting between Zelensky and Putin to finalize the agreement. “The parties are considering the possibility of scheduling a meeting in 2022 between the presidents of Ukraine and Russia to sign an agreement and address unresolved issues. The communiqué, shared with The Times by a Ukrainian negotiator, outlined a plan for other countries to intervene militarily in the event of another attack on Ukraine, referred to as Article 5. The proposed guarantor states included Great Britain, China, Russia, the United States, France, Turkey, Germany, Canada, Italy, Poland, and Israel. However, Russian officials appeared hesitant to commit to the deal publicly.
Negotiations continued via video call, with treaty drafts exchanged through WhatsApp. Russian billionaire Roman Abramovich played a role behind the scenes, relaying messages from President Putin to the negotiating teams. There were conflicting views on Putin’s intentions during the talks, with some questioning his sincerity.
The draft treaty included provisions for Ukraine’s neutrality and potential EU membership, but disagreements remained on missile range limits, language laws, and troop withdrawal. The most contentious issue was the veto power Russia sought over Ukraine’s security guarantees, which Kyiv rejected as a dealbreaker.” “Los Estados Garantes y Ucrania acuerdan que en caso de un ataque armado contra Ucrania, cada uno de los Estados Garantes… sobre la base de una decisión acordada por todos los Estados Garantes, proporcionará… asistencia a Ucrania, como un estado permanentemente neutral bajo ataque…” Con ese cambio, un miembro del equipo de negociación ucraniano dijo: “no teníamos interés en continuar las conversaciones”.¿Y ahora? Dos años después, aún no hay señales de que Rusia y Ucrania puedan regresar a la mesa de negociaciones. En un complejo turístico suizo este fin de semana, el señor Zelensky intentará persuadir a dignatarios de unos 100 países y organizaciones, incluida la vicepresidenta Kamala Harris, de que la victoria sigue siendo realista.Rusia no está invitada, y China, su socio más poderoso, decidió no asistir. El señor Zelensky se ha comprometido a seguir luchando, describiendo su plan de paz como uno en el que Rusia se retira de todo el territorio de Ucrania, paga reparaciones y es castigada por crímenes de guerra.”Si no avanzamos este año, entonces lo intentaremos de nuevo el próximo año”, dijo el señor Zelensky en privado a un homólogo europeo recientemente, según un diplomático europeo presente. “Y si no avanzamos el próximo año, lo intentaremos de nuevo el año siguiente, y el siguiente”. El presidente Volodymyr Zelensky de Ucrania se reunirá con dignatarios de más de 100 países y organizaciones en Suiza este fin de semana. Daniel Berehulak/The New York Times El señor Putin en los últimos meses intensificó los esfuerzos para avivar las divisiones occidentales al retratar la paz como al alcance en 2022, y decir que estaba preparado para reiniciar esas conversaciones. Los líderes de Ucrania han desestimado las declaraciones de Putin sobre el tema como engaños.”Putin es un mentiroso habitual, y sus recientes diatribas no son una excepción”, dijo el ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania en un comunicado.El señor Putin cambió a una postura más dura el viernes, insistiendo en que ordenaría un alto el fuego y negociaría solo si Ucrania se retiraba de las cuatro regiones que Moscú ha reclamado como propias y abandonaba sus aspiraciones de unirse a la OTAN.Incluso antes de la última demanda de Putin, los expertos dijeron que era difícil imaginar volver al tipo de acuerdo discutido en 2022. Ucrania está más decidida que nunca a unirse a la OTAN, un mensaje que reforzará cuando los líderes de la alianza se reúnan en Washington el próximo mes.En cambio, el final más probable de la lucha podría ser una tregua inquieta. Marc Weller, profesor de derecho internacional en Cambridge especializado en negociaciones de paz, dijo que esperaba que los principales países occidentales se centraran en defender la línea de batalla futura de Ucrania con Rusia “en lugar de buscar un acuerdo a través de ella”.”El Telón de Acero ahora caerá en la línea de ocupación administrada por los rusos en Ucrania”, dijo el señor Weller. Documentos originales Para omitir marcas identificativas, estos documentos han sido reescritos para parecerse a los originales. Se han mantenido los errores tipográficos en los documentos originales.17 de marzo de 2022, borrador del tratado Un borrador inicial de un tratado entre Ucrania y Rusia. El documento es una traducción al inglés que Ucrania proporcionó a los gobiernos occidentales en ese momento. [Inglés]29 de marzo de 2022, Comunicado de Estambul El acuerdo propuesto que se discutió en las conversaciones en persona en Estambul, según lo resumieron los negociadores ucranianos. [Traducción al inglés] [Original en ruso]15 de abril de 2022, borrador del tratado Un borrador posterior de un tratado entre Ucrania y Rusia. El encabezado del documento muestra que esta era una versión que llegó al escritorio del presidente Vladimir Putin. El mapa referido como Anexo 6 no está incluido. [Traducción al inglés] [Original en ruso]